El submarino, Leónidas Lamborghini
1
A bordo,
sólo un maldito
puerco
pasajero.
2
Ni capitán,
ni jefe de navegación,
ni tripulación,
ni nadie más
que él y yo,
perdido el rumbo.
3
¡Abajo! ¡Abajo!
Escondido, secreto,
vago por esos mares:
las corrientes
me llevan,
las corrientes
me traen:
los instrumentos
no funcionan ya.
¡Arriba! ¡Arriba!
en la superficie
de un desierto
océano.
4
Sólo ese pasajero
y yo
¡Sólo el y yo
y su asqueroso
tufo!
5
Lo sé,
él piensa
en un final.
En el fin del fin,
en el final
del final. No
en otra cosa...
¡El idiota!
¡El idiota!
6
¡Descendemos!
¡Descendemos!
¡Tocamos fondo!
¿Dónde? ¿Adónde?
[Peligro!
¡Crujo!
7
¿Qué paso?
¿Qué está pasando?
¿Qué pasará ahora?
¿Y sólo mirar hacia arriba?
¿Sólo esto queda?
¡Maldición!
8
Este hombre
arrodillado, extraviado.
gritando.
arrastrándose
de una punta a la otra.
9
De una punta
a la otra;
de una punta
a la otra.
¡Gritos
que son mis gritos!
No fui hecho
para resistirlo.
10
Una mancha
Apestosa
que grita
a la deriva.
Leónidas
Lamborghini
Leónidas Lamborghini poeta argentino nacido en Buenos
Aires el 10 de enero de 1927 y fallecido el 13 de noviembre de 2009 en la misma
ciudad. Estudió en la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires
FAUBA, trabajó como obrero textil y, desde mediados de los años 50, se dedicó
al periodismo. En 1977 emigró a la Ciudad de México, ciudad en la que residió
hasta 1990.