A cielo abierto
Como el milagro de las cosas
que pasaron
me siento un árbol por los vientos
castigado,
y son mis manos un temblor
de nido abierto
con los que escribo mis recuerdos
y mis días.
La vieja casa de una infancia
que no olvido
donde los viejos se sentaban
con sus cosas
y serpenteaban los inviernos
y pasaban
dejando un leve retumbar
de libro abierto.
Y si algún día comprendiera los idiomas
que entre las hojas teje un pájaro celeste
conocería de esta historia que a mi vida
le brinda siempre una canción a cielo abierto
con el oído en el trajín
de los que amo
yo fui hilvanando un canto a dios
en la espesura
en este patio que tejieron
con los niños
las manos recias de mi padre
que yo admiro.
En este canto yo prolongo
el día abierto
para tenerlos aquí cerca
en mi guitarra
y recordarles con el canto
de zorzales
el manantial que ellos sembraron
en mi infancia.
Rafael Horacio López
De Oda al río de los sauces, Cantata.
Editorial tinta Libre, córdoba, argentina
Octubre de 2017
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