Proceso impuro
Escribir es un proceso impuro,
es ver lo que hay oculto
en los profundos hoyos de la soledad,
desterrar los viejos papeles
reunidos en la infancia.
Desde el principio de las cosas
huimos hacia un lugar donde la piedra
creaba los sueños ardientes del verano.
Los hombres caminaban junto al mar
construyendo ciudades
que se deshacían en la mañana.
Y siempre el viento soplando despiadado,
soplando sin tregua.
Arriba el cielo,
abajo la tierra desolada,
a lo lejos,
el horizonte sin límites de las preguntas
Horacio Preler