2.   La noche trae caricias y roces antiguos a la mesa de los versos (encuentros de máximas cavilaciones y de dudas). Llega con arrebatos de...

SOLEDAD   Hay terribles monstruos a la espalda de mis amigos.   Con esta cara de vanos y endurecidos pelos con esta piel, con estos ojos, sa...

  LOS SIGNOS DE LA DEMENCIA   Esa parte rota en que dividimos el tiempo, la máquina que gira, los gongs. El rincón que apropia la basura. La...

  VARIABLES DE LA NATURALEZA HEROICA     Ríe la providencia sembrando ideas    que la reflexión no entiende. ¿Cómo vine a dar aquí, a este h...

Poema   Acá es difícil matar a alguien en Buenos Aires una vez maté a un poeta y dio igual; en este lugar hay tal aburrimiento que se traduc...

 RESPLANDORES   Ves que la noche esparce sus carbones y sientes la piel de un roce en los recuerdos. Imaginas los dedos revisando ebrios la ...

Hay una emoción que no basta para decir los días o llenar las noches   —Guárdame los vientos, la salud del laurel, el saco de pana. Guárdame...

SIMULACIÓN DE LA ROSA Piensa en la tarde sin la nube reveladora, sin los azorados ojos que ciñen la luz hasta la calm...

LIMINAR EL guerrero: Éramos eternos corriendo auténticos     detrás de los suefios, de los duendes,     d...

Disperso en uno, Ricardo Rubio De haber un sitio sagrado para un pastor de soledades sería justamente aquí: en es...

El tacto de los sueños, Ricardo Rubio Es una mirada en la que palpita el vértigo y recobra fuerzas el uno. Es pronta ...