22 de mayo de 2017

La muerte del loco, Rafael Horacio López

La muerte del loco

Nadie se entero de su muerte;
nadie noto que una pierna
           estaba sola
y que un perro
andaba distraído.
Nadie notó el vacío
que su cabeza tonta
dejó en los números del pueblo.
Por eso hay una lágrima
que espera en su sal:
porque en cada lágrima caben todas las amarguras.

Y en ese mundo salado no cabemos todos.

Rafael Horacio López

No hay comentarios:

Publicar un comentario