Arte Poética o de las significaciones
La palabra puede tornar transparente al
hombre
he aquí un ejercicio permitido sólo a los
más puros
lo verdadero
surge en la desnudez de la aparente
carencia de sentido
cabalgando en la extrema mirada de las
significaciones alejadas
todo se vuelve próximo
la claridad meridiana ahoga cualquier
esperanza
de alcanzar lo más hondo
en el ámbito sin aire de las
significaciones cotidianas
fracasa
el nacimiento maravilloso
con el furor sagrado se destruye la
podredumbre
alimento natural del buen burgués que
acaricia diariamente la cretinización
[civilizada
cuando el furor sumerge sus manos en océano
se llama desprecio
y con sus dedos innumerables alcanza a
tocar en el fondo la luz absoluta
copulando el desprecio y la luz cumplen el
acto supremo de la creación
el nacimiento del hombre verdadero a partir
de la podredumbre
pero todo ha cambiado
después de la invención del mordisco
luminoso
que hace sangrar la realidad última de los
seres y las cosas
detrás de la piel del hombre está el hombre
detrás de la inmovilidad de lo inerte
está la gran vida cósmica que palpita
por cada herida de luz se derrama el gozo
esencial y único
el gozo de sí mismo
que se confunde con el gozo de ser
universal
por cada herida de luz se derrama
la perfecta identidad, lo uno y lo múltiple
lo separable y unible
más allá del tiempo y del espacio
no se pueden palpar las palabras sólo se
palpan los gritos
en el fondo del océano la voz va a
despertar a los sueños
la imagen
es un signo de la penetración del sueño en
el mundo
la imagen
hace estallar los oídos indiferentes
toda palabra desnuda de sentido se colma de
vida
de la vida ardiente que quema los labios
y que se transfigura en el silencio
como en un sagrado contacto
es el triunfo final de la palabra casi
silenciosa
la palabra mezclada con noche
la palabra que vuela incansable hacia el
deseo
haremos así cantar el silencio poblado de
imágenes
en una noche iluminada por la luz absoluta.
Aldo Pellegrini de El muro secreto, 1949.
Tomado de La valija de Fuego (Poesía Completa), Editorial Argonauta pag. 108
(2001)
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