30 de abril de 2019

Para escribir el poema, Rodolfo Godino


Para escribir el poema

The poem
is complex and the place made
in our lives
f0r the poem.

Williams Carlos Williamss


I

Esta es la ley callada:
por más que escandalice,
la verdad interior
--que traba la lengua y anda por
resistiendo a sí misma-,
debe ser descubierta.

Eso no daña el prestigio
del corazón multiforme,
que debe insistir
y ser escuchado aun como culpa,
omisión,
                error, miedo, memoria
o sed inconfesa del cuerpo:
la historia de una combustión
siempre acorralada.
De lo contrario sólo se alumbran
fenómenos de oficio,
ningún animal completo.

Esas reticencias glaciales
consumen su invalidez, y su sanción
es muerte verdadera.
                                         Aunque suene
trágico, no hablo del infierno
sino de palabra estéril.


2

Sin las cosas no hay poema.
Un hombre bajo hechizo
registrando una revelación personal.
Esa es, aunque no pueda
ser probada, la ley de lo creado
infinitamente repetida:
podrán engarzar el cuerpo
en los viajes de la savia, de la luz,
filtrando violencia y acidia
en las crisis graduales de la carne
no humana del mundo natural.
Amándolas, sin alegorías,
serán parte, maderas, flores,
unidos en los cambios
y en el renacimiento, en los ciclos
de silenciosas convulsiones.
Nunca la vida pequeña
será suficientemente expandida.


3

Con escrúpulos no hay poema.
Cuando la realidad cuestionada
se retire, lo ambiguo crecerá
en el exceso de conciencia,
sin discreción, aceptándose a sí mismo.

Mientras el mundo se disipa
y aun inclinados a lo juicioso,
retengan: lo fantástico se ajusta
por la razón; el gobierno
combinatorio de lo mágico se ejerce
puertas adentro.

                                 Lo que merezcan
y lo que alcancen no serán tormentos:
la humillación del oficio siempre guarda
un rédito solemne.

                                    En la pelea
con la palabra inhábil, partes
del corazón y la verdad se pierden;
la imprecisión del espíritu
será imprecisión en la palabra.
Sin artificio no hay poema.

Puntas del Campanero.
Minas, Uruguay, 1993

Rodolfo Godino

29 de abril de 2019

Estas manos, Sandro Tedeschi


estas manos
donde se enarbola la promesa
de arrancarle un hijo a tanta soledad

estas manos
con todos sus adioses en resumen

1964

Sandro Tedeschi de Fé de erratas y otras consideraciones, Editorial Losada (1967)

28 de abril de 2019

Entonces, Sandro Tedeschi


entonces
    creer que no hay remedio posible
que los pájaros anden significa mucho o nada
sólo nos queda hacer amistad con nuestra sombra
para no andar tan solitarios

circular por los días sin transitarnos

-recordar aquella mano
que sobrevoló con dolor toda nuestra infancia
y que de golpe se hundió en la tarde
bebiéndola de un sorbo-

recordar en la calle en los párpados del agua
en la ventana cerrada a toda primavera

recordar los rostros indecisos
recordar los amigas una mujer alguna canallada
recordar que llueve y los sin techo
recordar las gaviotas los barcos que se hacen al
   bolsillo
recordarlo todo hasta el detalle sórdido
recordar
    porque pegar el salto es peligroso

JULIO 64

Sandro Tedeschi de Fé de erratas y otras consideraciones, Editorial Losada (1967)

27 de abril de 2019

la experiencia me enseña que los días se destiñen, Sandro Tedeschi


la experiencia me enseña que los días se destiñen
y los años que pasan ya no vuelven más y así mi
cariño
tremendo reptil que se adueñó de mi desde la
infancia
necesita reaprovisionarse de hechos desacostumbrados
sublimes aventuras mujeres hermosas y traidores
recuerdos imborrables que contrastan con el ritmo
de mi mente
esperanzas de un futuro venturoso
donde el mundo no es más que un enorme
caramelo depositado en mi lengua
y yo
divino sibarita
converso con los leones o el caballo blanco
de san martín
que me cuenta maravillas insospechadas
de las que soy único custodio y sacerdote

Sandro Tedeschi de Fé de erratas y otras consideraciones, Editorial Losada (1967)

26 de abril de 2019

Y sin embargo, Sandro Tedeschi


Y sin embargo
el ché toma café con la historia en el Tortoni
de a sorbos sin apuro
saben los dos de quién es la victoria
qué moneda se cambia en los bolsillos
del habitante azaroso del umbral de los puemos
qué balas se reservan en los montes
cuál trabajo se suda en cada mina
en qué rebeldía se está parando ya
se despereza ya y despierta
y entonces el ché oye las voces que lo nombran
el miedo que recorre redacciones despachos oficinas
iglesias ministerios
el miedo con su nombre y la Alianza para el Progreso
cl miedo con su nombre y las Fuerzas Armadas
el miedo con su nombre y la Civilización Occidental
el miedo con su nombre el miedo ché el miedo historia
una tarde de verano en buenos aires en lima en
bogotá en caracas
el miedo tornó su nombre y el estiércol
el miedo semilla con su nombre y el estiércol
el miedo semilla con su nombre y el estiércol y
la lluvia de balas
la semilla con su nombre y la lluvia de balas
su nombre y la lluvia de balas V l
la lluvia de balas
de balas y corazón arriba se terminó el estiércol
pero con la lluvia de balas y la semilla ché y el
trabajo che
la revolución ché
y el ché sigue tomando café con la historia en el
Tortoni


19 ENERO 66

Sandro Tedeschi de Fé de erratas y otras consideraciones, Editorial Losada (1967)